Las lentillas son una excelente opción para corregir la visión sin necesidad de usar gafas. Sin embargo, en ocasiones puede ocurrir que no encuentres la lentilla en el ojo al intentar retirarla. Esto puede generar cierta preocupación y ansiedad, pero es importante mantener la calma y seguir algunos pasos para poder sacarla de manera segura y sin causar daño a tus ojos.
Mantén la calma
Lo primero que debes hacer es mantener la calma. No te preocupes, es normal que en ocasiones la lentilla se mueva y no puedas encontrarla fácilmente. No te frotes los ojos ni intentes forzar su extracción, ya que esto puede causar irritación o lesiones en tus ojos.
Pide ayuda si estás acompañado o utiliza un espejo si estás solo
Si estás acompañado, puedes pedirle a alguien que te ayude a buscar la lentilla en tu ojo. Si estás solo, puedes utilizar un espejo para poder ver mejor y localizar la lentilla. Asegúrate de tener buena iluminación para facilitar la búsqueda.
Usa lágrimas artificiales para rehidratar la lente y el ojo
Si no encuentras la lentilla en tu ojo, puedes utilizar lágrimas artificiales para rehidratar la lente y el ojo. Esto puede ayudar a que la lentilla se mueva y sea más fácil de encontrar. Aplica unas gotas de lágrimas artificiales en tu ojo y parpadea suavemente para distribuir el líquido.
Si no puedes sacarla o sigues sintiendo molestias, contacta con un óptico u oftalmólogo
Si después de intentar los pasos anteriores no puedes sacar la lentilla o sigues sintiendo molestias en tu ojo, es importante que contactes con un óptico u oftalmólogo. Ellos podrán examinar tu ojo y ayudarte a retirar la lentilla de manera segura.
Si está en el párpado inferior
En algunos casos, la lentilla puede deslizarse hacia el párpado inferior. Si sospechas que la lentilla está en esta área, puedes seguir los siguientes pasos:
Tira de él hacia abajo y mira hacia arriba y a los lados
Con las manos limpias, tira suavemente del párpado inferior hacia abajo. Luego, mira hacia arriba y a los lados para intentar localizar la lentilla. Si la ves, puedes intentar retirarla con cuidado utilizando las yemas de tus dedos.
Busca la lentilla en el suelo
Si no puedes encontrar la lentilla en tu ojo, es posible que haya caído al suelo. Asegúrate de buscarla en un área bien iluminada y revisa cuidadosamente el suelo. Si la encuentras, lávala con solución para lentillas y vuelve a colocarla en tu ojo siguiendo las instrucciones de uso.
Si está en el párpado superior
En otros casos, la lentilla puede quedar atrapada en el párpado superior. Si crees que la lentilla está en esta área, puedes seguir los siguientes pasos:
Súbelo con el dedo y mira hacia abajo
Con las manos limpias, utiliza tu dedo índice para subir suavemente el párpado superior. Luego, mira hacia abajo para intentar localizar la lentilla. Si la ves, puedes intentar retirarla con cuidado utilizando las yemas de tus dedos.
Parpadea mucho para intentar expulsar la lentilla
Si no puedes encontrar la lentilla en tu ojo, puedes intentar parpadear mucho para intentar expulsarla. A veces, el movimiento del parpadeo puede hacer que la lentilla se desplace y sea más fácil de encontrar o expulsar.
Recuerda que si no puedes sacar la lentilla o sigues sintiendo molestias en tu ojo, es importante que contactes con un óptico u oftalmólogo. Ellos podrán brindarte la ayuda necesaria y asegurarse de que tu ojo esté en buen estado.
Si no encuentras la lentilla en tu ojo, mantén la calma y sigue los pasos mencionados anteriormente. Utiliza lágrimas artificiales para rehidratar la lente y el ojo, y busca ayuda profesional si no puedes sacarla o sigues sintiendo molestias. Recuerda siempre tener las manos limpias al manipular tus lentillas y seguir las instrucciones de uso proporcionadas por tu óptico u oftalmólogo.