La dificultad en la deglución, también conocida como disfagia, puede ser un problema que afecte la calidad de vida de las personas. La terapia para reducir esta dificultad puede ser de gran ayuda para mejorar la capacidad de tragar alimentos y líquidos de manera segura y eficiente. En este artículo, exploraremos algunas estrategias efectivas para mejorar la deglución y facilitar el proceso de alimentación.
Estrategias para mejorar la higiene bucal y la postura
Importancia de la higiene bucal
La higiene bucal es fundamental para mantener una buena salud oral y prevenir complicaciones relacionadas con la deglución. Es importante cepillarse los dientes después de cada comida y utilizar hilo dental para eliminar los restos de alimentos que puedan quedar atrapados entre los dientes. Además, es recomendable visitar regularmente al dentista para realizar limpiezas profesionales y detectar cualquier problema dental a tiempo.
Postura adecuada al comer y beber
La postura adecuada al comer y beber puede marcar la diferencia en la facilidad de la deglución. Es importante sentarse en una silla cómoda, con los pies descruzados y apoyados en el suelo. Mantener una postura erguida ayuda a que los músculos de la garganta y el esófago trabajen de manera más eficiente durante la deglución.
Utilización de mesa alta para reducir la distancia al plato
Una estrategia efectiva para reducir la dificultad en la deglución es utilizar una mesa alta que permita acercar el plato a la boca. Esto reduce la distancia que los alimentos tienen que recorrer para llegar al esófago, facilitando el proceso de deglución. Además, es recomendable utilizar utensilios de cocina adaptados, como cucharas y tenedores especiales, que faciliten la manipulación de los alimentos.
Técnicas para la manipulación de los alimentos en la boca
Colocación de la comida en la lengua
Una técnica efectiva para facilitar la deglución es colocar la comida en la parte media de la lengua o en el lado que mejor se mueva. Esto ayuda a que los músculos de la lengua trabajen de manera más eficiente para empujar los alimentos hacia la garganta.
Masticación y cierre de labios
Es importante masticar los alimentos de manera exagerada y cerrar los labios con fuerza durante la masticación. Esto ayuda a triturar los alimentos en trozos más pequeños y facilita el proceso de deglución. Además, mantener la boca cerrada durante la masticación evita que los alimentos se salgan de la boca y dificulten la deglución.
Trucos para tragar con facilidad
Existen algunos trucos que pueden ayudar a tragar los alimentos con mayor facilidad. Uno de ellos es contener la respiración mientras se traga la comida, apoyar la barbilla en el pecho y tragar con fuerza. Esto ayuda a que los músculos de la garganta trabajen de manera más coordinada y facilita el paso de los alimentos hacia el esófago.
Consejos para evitar atragantamientos y reflujo
Eliminación de restos de comida
Después de cada comida, es importante eliminar los restos de comida que puedan quedar en la boca. Esto se puede hacer tosiendo con fuerza para expulsar los restos de alimentos que puedan quedar en la boca, garganta o cuerdas vocales. Además, es recomendable beber pequeños sorbos de agua para enjuagar la boca y eliminar cualquier residuo.
Prevención de atragantamientos
Para prevenir atragantamientos, es importante evitar comer alimentos muy duros, secos o que se desmenucen fácilmente. Además, es recomendable triturar los alimentos sólidos hasta conseguir una consistencia similar a la crema o el puré, si es necesario. Utilizar cubiertos de postre en lugar de cubiertos grandes también puede ayudar a evitar comer de forma compulsiva y reducir el riesgo de atragantamiento.
Posición post-comida para evitar reflujo
Después de cada comida, es recomendable quedarse sentado en posición vertical durante un tiempo para evitar el reflujo nasal de los alimentos. Esto ayuda a que los alimentos se dirijan hacia el estómago de manera adecuada y reduce el riesgo de reflujo gastroesofágico.
La terapia para reducir la dificultad en la deglución puede ser de gran ayuda para mejorar la calidad de vida de las personas que sufren de disfagia. Al seguir estrategias efectivas, como mantener una buena higiene bucal, adoptar una postura adecuada al comer y utilizar técnicas para la manipulación de los alimentos en la boca, es posible facilitar el proceso de deglución y disfrutar de una alimentación segura y placentera. ¿Qué cambios has notado en tu vida diaria desde que comenzaste la terapia para reducir la dificultad en la deglución?