Medición de la agudeza auditiva
La agudeza auditiva se refiere a la capacidad de una persona para percibir y distinguir los diferentes sonidos en su entorno. Es una medida de la sensibilidad del oído y se puede medir a través de pruebas específicas. Estas pruebas evalúan la capacidad de una persona para escuchar sonidos de diferentes frecuencias y volúmenes.
Prueba de agudeza auditiva
La prueba de agudeza auditiva, también conocida como audiometría, es el método más común para medir la agudeza auditiva. Durante esta prueba, se utilizan auriculares especiales para emitir diferentes tonos y volúmenes de sonido en cada oído. El paciente debe indicar cuando escucha el sonido presionando un botón o levantando la mano.
La prueba de agudeza auditiva se realiza en una cabina insonorizada para eliminar cualquier ruido externo que pueda interferir con los resultados. Los resultados se registran en un gráfico llamado audiograma, que muestra la capacidad de audición de una persona en diferentes frecuencias.
Audiometría: valores y pruebas
La audiometría evalúa la capacidad de una persona para escuchar sonidos en diferentes frecuencias, que se miden en Hertz (Hz). Los tonos puros se utilizan para evaluar la audición en diferentes frecuencias, desde bajas frecuencias (250 Hz) hasta altas frecuencias (8000 Hz).
La prueba de audiometría también evalúa la capacidad de una persona para escuchar sonidos a diferentes volúmenes, que se miden en decibelios (dB). Los sonidos suaves se presentan primero y luego se aumenta gradualmente el volumen hasta que el paciente los escuche.
Factores que afectan la agudeza auditiva
La agudeza auditiva puede verse afectada por varios factores, tanto fisiológicos como ambientales. Algunos de los factores fisiológicos que pueden disminuir la agudeza auditiva incluyen:
Estados fisiológicos que disminuyen la agudeza auditiva
– Envejecimiento: A medida que envejecemos, es común experimentar una disminución gradual de la agudeza auditiva. Esto se debe al desgaste natural de las células sensoriales del oído interno.
– Exposición a ruido fuerte: La exposición continua a ruidos fuertes, como música alta o maquinaria ruidosa, puede dañar las células sensoriales del oído interno y disminuir la agudeza auditiva.
– Infecciones del oído: Las infecciones del oído, como la otitis media, pueden causar inflamación y daño en el oído interno, lo que puede afectar la agudeza auditiva.
– Medicamentos ototóxicos: Algunos medicamentos, como ciertos antibióticos y quimioterapia, pueden tener efectos secundarios ototóxicos y causar daño en el oído interno.
Audiometría: normal y anormal
La audiometría se utiliza para determinar si la audición de una persona es normal o anormal. Los resultados de la audiometría se comparan con valores normales establecidos para diferentes grupos de edad.
Audiometría normal en diferentes edades
La audición normal puede variar según la edad. En los recién nacidos y los niños pequeños, se espera que la audición sea excelente en todas las frecuencias. A medida que los niños crecen, es normal que haya una ligera disminución en la agudeza auditiva en las frecuencias más altas.
En adultos jóvenes y de mediana edad, se espera que la audición sea excelente en todas las frecuencias. Sin embargo, a medida que las personas envejecen, es común experimentar una disminución gradual de la agudeza auditiva, especialmente en las frecuencias más altas.
Valores normales de la audiometría
Los valores normales de la audiometría se representan en el audiograma. En un audiograma normal, los tonos puros se escuchan claramente en todas las frecuencias y los volúmenes. Los resultados se representan en decibelios (dB), donde 0 dB representa el umbral de audición normal.
En un audiograma normal, los tonos puros se escuchan a volúmenes suaves (0-25 dB) y se escuchan claramente en todas las frecuencias. A medida que aumenta el volumen, se espera que el paciente escuche los tonos puros en volúmenes más altos.
La agudeza auditiva es la capacidad de una persona para percibir y distinguir los diferentes sonidos en su entorno. Se puede medir a través de pruebas de agudeza auditiva, como la audiometría. La agudeza auditiva puede verse afectada por varios factores, como el envejecimiento, la exposición a ruido fuerte y las infecciones del oído. Los resultados de la audiometría se comparan con valores normales establecidos para diferentes grupos de edad, y un audiograma normal muestra una audición clara en todas las frecuencias y volúmenes.